Mujer sin hogar murió de frío en Skid Row durante las tormentas de la semana pasada
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Una mujer sin hogar de 60 años de edad murió a causa de la exposición al frío sobre una acera de Skid Row durante la tormenta de El Niño del jueves, dijeron las autoridades.
La mujer, identificada por sus amigos como Barbara Brown, murió sin una tienda de campaña, empapada por la lluvia y envuelta en una cobija mojada sobre un pedazo de plástico, dijeron los testigos.
El capitán de la policía de Los Angeles, Mike Oreb, dijo que la mujer había rechazado una oferta de albergue realizada por parte de la Autoridad de Servicios para los Desamparados de Los Angeles el día antes de que murió.
En un emotivo memorial callejero celebrado para Brown el sábado, el diácono Alexander, quien vive en Skid Row, dijo que llamó a la línea de emergencia 911 esa tarde y dijo que la policía debería sacar a Brown de la calle o “estará muerta para mañana”.
El operador del 911 le dijo que la policía no podía llevársela sin su consentimiento, dijo Alexander.
Oreb no podía confirmar la conversación pero dijo que la policía no habría sido capaz de ordenarle a Brown que se retirara de la calle. “No podemos obligarla a irse o buscar refugio”, dijo. “Sólo podemos animarla a que busque refugio”.
La muerte de Brown llegó mientras la ciudad y el condado, después de meses de deliberaciones, publicaron el primer plan integral de la región, en más de una década, para disminuir el número de personas sin hogar.
Los funcionarios dijeron que un grupo de trabajo había estado realizando preparativos para proteger a las personas sin hogar durante las tormentas potencialmente mortales.
Eric Garcetti dijo que los oficiales de la policía de Los Angeles pueden detener temporalmente a las personas sin hogar que acampan ilegalmente cerca del río de Los Angeles y que se encuentran en peligro pero se niegan a moverse.
El gobernador de Nueva York Andrew Cuomo la semana pasada ordenó que las personas sin hogar sean llevadas a albergues durante las temperaturas extremadamente bajas.
El sábado por la tarde, en una declaración escrita proveniente de la oficina de Garcetti decía que la ciudad está “explorando lo que podemos hacer para ayudar a aquellos que se niegan a la asistencia. La prioridad del alcalde es mantener seguros a los angelinos durante esta temporada de tormentas y con urgencia está haciendo todo lo posible para evitar que ocurran estas tragedias”.
Peter Lynn, director de la Autoridad de Servicios para los Desamparados de Los Angeles, dijo que el proteger a la población sin hogar es una “prioridad máxima entre todos los líderes de Los Angeles” y que el sistema de albergues de invierno de la agencia, con 7,245 camas, aún no está a plena capacidad.
“Seguiremos trabajando diariamente para animar a las personas a entrar”, dijo.
No hubo ninguna discusión por parte de los amigos de Brown, quien fue descrita como una persona que sufría de problemas de salud mental y alcoholismo, y quien a menudo se negó a aceptar ayuda. Un conocido comentó que Brown le dijo a la policía que no era indigente; otro dijo que Brown le escupió cuando le trajo una cobija.
Alexander dijo que un día antes de su muerte, echó una cobija sobre ella pero rápidamente quedó empapada.
“La lluvia simplemente caía sobre ella”, dijo durante el memorial callejero en Skid Row. “Me culpo a mí mismo”.
Angela Harper, una ex residente de Skid Row quien realiza labor de voluntaria para ayudar a las personas sin hogar, dijo que Brown había salido y entrado de albergues para indigentes en Skid Row durante ocho años y ya no confiaba en nadie que intentaba ayudarla.
“Una vez que estás aquí durante muchos años, crees que esto es la vida”, dijo Harper. “Culpo al sistema. Lo que necesitó desde el principio, cuando estaba viviendo en SROs, era ayuda con los problemas de alcohol, drogas y salud mental”.
Un residente del Hotel Ellis localizado junto al punto donde dormía Brown en las calles 6th y Stanford dijo que los trabajadores sociales habían empezado a ganarse su confianza.
Harper dijo que aunque es demasiado tarde para Brown, “hay cientos de personas como ella aquí”.
Otros residentes de skid row recordaron haberle llevado comida, ropa o una bolsa de dormir a Brown, pero dijeron que todos estos suministros parecían evaporarse.
Alexander dijo que la tienda de campaña de Brown se quemó en un incendio ocurrido hace un año y nunca fue reemplazada.
El “General” Jeff Page, quien está organizando una junta vecinal para Skid Row, dijo que los funcionarios deberían utilizar la muerte de Brown como un estudio de caso sobre cómo solucionar los problemas de esta comunidad.
Kevin Haah, pastor de New City Church Los Angeles y presidente del Consejo del Clero del centro de la ciudad, repartieron flores a los dolientes para colocarlas en el improvisado santuario callejero en donde murió Brown.
“No creemos que esto sea correcto”, dijo. “Rezamos para que las personas de esta ciudad hagan algo sobre este lugar”.
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